Para muchos, James Bond ya no es lo que era. El personaje de ficción, nacido para la literatura de la mano de Ian Fleming en la década de los 50 del siglo pasado y que ha tenido (y tiene) una prolífica vida en el cine, ha ido cambiando para adaptarse a los nuevos tiempos. Hace más de 10 años que no vemos a James Bond con un cigarrillo y su consumo de alcohol también se ha reducido. Además, el último James Bond es rubio y tiene los ojos azules, a diferencia de sus predecesores… Y de la descripción que Fleming hizo de Bond en sus novelas. Así que podemos considerar que era cuestión de tiempo que el siglo XXI alcanzase a su coche.

A lo largo de la saga, James Bond se ha puesto al volante de diferentes coches de diferentes fabricantes. Mientras en las novelas de Fleming conducía habitualmente algún coche de Bentley, en las películas por sus manos han pasado Lotus, BMW, Ford… hasta que su figura ha quedado íntimamente ligada al fabricante Aston Martin.

Pero todo apunta a que el último coche de James Bond será un Aston Martin 100% eléctrico.

Cary Joji Fukunaga, quien dirige desde la dirección los hilos de James Bond 25 (película que probablemente se titulará ‘Eclipse’), parece haber sido el responsable de poner a Bond al volante de un coche eléctrico.

Aston Martin Rapide E, el coche eco friendly de James Bond

Así, el coche que conducirá James Bond en su nueva película (la 25) será un Aston Martin Rapide E. Un coche que no estará disponible hasta finales de año, pero que ya se está beneficiando de toda la publicidad alrededor del agente 007.

El modelo Rapid E contará con dos motores eléctricos que estarán en la parte trasera del coche y una batería eléctrica de 65kmh, gracias a la que ofrecerá una autonomía de 320 kilómetros.

No se sabe mucho más sobre el aspecto final que tendrá el coche, de qué color será su pintura etc. Pero seguro que el próximo coche de James Bond no decepciona.