El Citröen Méhari es uno de esos coches que evocamos con una sonrisa en los labios. Un coche de otra época, simpático, coqueto, de los que dejan huella en los automovilistas. De hecho, en algunos automovilistas dejó verdadera huella. Este vehículo cuenta con varios clubes de fans y gracias a mantener viva su afición a este automóvil de finales de los 60 han conseguido incluso que se hayan vuelto a fabricar componentes para el coche… Hasta la carrocería.
No, no es una opción barata la de conseguir una carrocería nueva para el Méhari, pero la opción existe.
El dromedario de Citröen
El nombre de Mèhari es toda una declaración de intenciones.
La palabra en cuestión es originaria del mundo árabe y significa “dromedario doméstico de tamaño algo mayor que el normal y de gran resistencia y velocidad”.
Este dromedario es habitual en la zona norte del continente africano y del Sáhara.
Con este nombre Citröen bautizaba a un coche con carrocería descapotable y de bajo costo.
Era un vehículo que pretendía despertar la libertad, el lado salvaje, el salir fuera del camino… No era de extrañar: su lanzamiento se produjo en mayo de 1968, en plena ‘revolución’ feminista, ecologista y liberal francesa.
Años más tarde, el coche incluso conseguiría un hueco en la gran pantalla gracias a su aparición en la serie de películas “Los Gendarmes” a partir de 1978, con Louis de Funès.
El vehículo era totalmente descapotable a partir de la cintura y su carrocería estaba fabricada por completo con acrilonitrilo butadieno estireno, más conocido como plástico ABS. Este material ha sido muy utilizado en automoción debido a su gran resistencia a los impactos.
No se convirtió en un súper ventas, pero sus más de 144.953 unidades fabricadas sí alcanzaron la categoría de icono. En 1988 dejaría de fabricarse, ¡pero hubo segunda parte!
Y es que Citröen rescató hace algunos años el concepto del Mèhari, transformándolo en vehículo 100% eléctrico. Había nacido el E-Mehári.
En 2018, para celebrar los 50 años del primer Méhari, Citröen ha presentado un colorista y divertido art car bajo la batuta del artista Jean- Charles de Castelbajac.
Una vez más, la carrocería de un coche se convierte en un lienzo en blanco. Una vez más, el trabajo de pintura va más allá de la pura técnica para mezclarse con el arte.
Castelbajac se ha inspirado claramente en el espíritu de Mayo del 68 para abordar el reto y este art car E-Mehári de 2018 está lleno de color y simbología libre y optimista. Todo un guiño a la cuna del Mèhari original.