Ferrari tiene una larga historia a sus espaldas. Fundada a finales de los años 20 del siglo pasado, los deportivos de la marca Ferrari tienen un color en la mente de los automovilistas: el rojo. Rojo Ferrari, o para ser más exactos Rosso Corsa.
Por supuesto que ha habido Ferraris de otros colores. Algunas pequeñas ediciones con pintura de otro color. Y algunos felices dueños de Ferraris que querían dar al coche su toque personal a través de un trabajo de pintura personalizado.
El coche que hoy nos ocupa encaja en esta última categoría. Y es que se trata de un Ferrari F40. Este modelo salió de fábrica entre finales del 80 y principios de los 90. 1.300 unidades salieron a la calle; la mayoría en el icónico color rojo que todos relacionamos con este fabricante. Nunca hubo un F40 verde… al menos que sepamos, hasta ahora.
El automovilista Eugenio Amos, que es además piloto de carreras y está casado con la modelo Margherita Missoni, se hizo con una unidad de F40. Por supuesto, el coche estaba pintado de rojo… pero Amos decidió en seguida que quería cambiar por completo el look del coche: ¡su F40 iba a ser verde!
Green is the new red
Ha llegado a publicar Amos en su cuenta de Instagram
Eligió un tono verde Abetone, que es un verde profundo, parecido a un verde bosque. Un color para la pintura del coche que además iba perfecto con la tapicería en color marrón claro de los asientos.
El trabajo de repintar por completo el coche sin duda no ha debido ser fácil. No sólo porque se trataba de cambiar el color del coche entero de rojo a verde, sino porque además, aunque te sorprenda, la carrocería del Ferrari F40 incluía fibra de carbono (fue, de hecho, de los primeros súperdeportivos en hacerlo).
Pintar el coche, ya sea cambiando el color, ya sea queriendo mantener el mismo color, siempre es un trabajo delicado que requiere de una gran profesionalidad. Para que el coche parezca recién salido de fábrica hay que respetar procesos y métodos de trabajo, así como contar con personas cualificadas y las mejores herramientas y materias primas.
Todo esto no lo encontrarás en un taller de chapa y pintura barato, sino que te compensará localizar un taller experto en chapa y pintura. Y es que la diferencia de precio seguro se nota: si apuestas por lo barato te puede acabar saliendo caro (imperfecciones y defectos en la pintura), mientras que, si eliges a un taller de una red especializada en chapa y pintura, como la red CertifiedFirst, saldrás del taller con una sonrisa y tu coche como nuevo. Y te costará menos de lo que estás pensado: compruébalo con la calculadora de presupuestos online de CertifiedFirst y calcula en menos de un minuto el precio de pintar el coche.