¿Sabías que algunos colores para la pintura del coche pueden dificultar la llegada del coche autónomo?

¿Sabías que algunos colores para la pintura del coche pueden dificultar la llegada del vehículo autónomo?

Como lo lees. Con la llegada del coche autónomo, el color de la pintura con la que vestimos la carrocería del vehículo podría tener implicaciones más elevadas. Más allá del gusto personal. O de la seguridad vial.

Prácticamente cada semana leemos en la prensa internacional alguna referencia sobre los avances del vehículo autónomo, o, lo que es lo mismo, los avances de los coches que no necesitarán conductor humano. Son varios los fabricantes que trabajan en proyectos de coche autónomo, además de empresas tecnológicas.

Y, al igual que ya ha ocurrido con anteriores avances de la automoción, la llegada del coche autónomo podría impactar de manera importante también en los materiales empleados en la carrocería… e incluso en los colores disponibles para la pintura del coche.

De igual manera que en el pasado se buscaron materiales más ligeros (y, de hecho, se sigue haciendo, como muestra el interés por la fibra de carbono o materiales como el bambú o el grafeno), la forma en que funciona el vehículo autónomo pone sobre la mesa algunos problemas que hay que solucionar.

El coche autónomo sustituye la conducción humana por una gran cantidad de sensores que obtienen información tanto del vehículo como de lo que ocurre a su alrededor y por unidades que procesan toda esa información recogida. De esta forma se detectan los otros coches y sus maniobras, si hay peatones u obstáculos en la calzada etc.

¿Sabías que algunos colores para la pintura del coche pueden dificultar la llegada del coche autónomo?

El problema llega cuando los sensores tienen dificultades para captar la información de forma fiable.

En ese sentido, resulta que los materiales y la pintura automotriz son, en ocasiones, problemáticos.

Por ejemplo, el plástico no refleja las ondas de igual manera que otros materiales como el aluminio y el acero. Esto supone que un sensor puede tener problemas para ‘percibir’ un coche si está tratando de captar alguna parte plástica.

El tipo de pintura y el color de la misma también arrojan dudas. Por ejemplo, si la pintura es metálica o de color negro (ese negro que tantos ‘fans’ tiene) tenemos el mismo problema. Por ejemplo, según el experto en color PPG Refinish, aquellos coches pintados de color negro pierden un 50% de eficacia en la forma en que los sensores los detectan respecto a los coches de color blanco.

En realidad, esto no debería extrañarnos. Los estudios que afirman que los coches de color negro son menos seguros que los coches blancos o gris plata se basan en una idea parecida: y es que el ojo humano no percibe la misma cantidad de información cuando el objeto es negro. Además, en un escenario nocturno la cosa se complica.

¿Pasa la solución por el hecho de que todos los vehículos autónomos sean de color blanco? Seguramente no. Más bien, con el tiempo, se irán desarrollando pinturas cuyas propiedades, independientemente del color, sean adecuadas para los coches sin conductor.

Así que, sea tu coche autónomo o no, estamos seguros de que podrás elegir entre una gran variedad de colores. Y en CertifiedFirst, tu red de talleres expertos en chapa y pintura, te lo ponemos bien fácil. Asómate aquí y descubre las ventajas que tiene para ti y tu coche trabajar con nosotros.

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