Quizás alguna vez hayas visto o leído en prensa y medios de comunicación el concepto de carrocería ‘targa’ para referirse a un descapotable.
En realidad el término targa hace referencia a un tipo de techo concreto que se utiliza en algunos deportivos descapotables.
Aunque el primer coche de producción que contaba con este tipo de techo fue el Triumph TR4 en 1961, fue Porsche quien popularizó el término.
Reminiscencias de una carrera mítica
Porsche lo utilizó por primera vez en 1965, en su modelo 911, y lo llamó targa como conmemoración de la carrera de Targa Florio, en la que había resultado victorioso nada menos que cinco veces. Con el tiempo saldría ganador en más ocasiones; de hecho, es el fabricante que más veces ha triunfado en esta mítica carrera.
La Targa Florio está considerada como una de las carreras más antiguas del mundo, siendo su primera edición en mayo de 1906, convocada por el multimillonario Vicenzo Florio. Se disputaba en un circuito plagado de curvas y subidas y bajadas y salpicado de pueblecitos en las cercanías de Sicilia, donde los pilotos y super deportivos de la época competían en carreteras ‘normales’. En 1977 pasó a transformarse en el Rally Targa Florio.
¿Un escudo como techo?
La palabra targa significa ‘escudo’, pero para Porsche significaba mucho más. Triunfo. Gloria. Así que decidió homenajear sus propias hazañas eligiendo esta palabra para patentar su techo rígido desmontable. Y es que, en este tipo de techo, la parte situada entre el montante A y el montante B se puede extraer por completo, y además en la zona del techo el montante B adopta la forma de una barra que hace las veces de barra antivuelco.
Este tipo de techo sufrió después una evolución hasta un techo más bien corredizo, aunque a lo largo de su historia ha sido utilizado esporádicamente por algunos otros fabricantes en sus modelos deportivos, como Ferrari, Corvette, Camaro…
El modelo 911 Targa todavía está disponible
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