Si vives en Madrid o en Barcelona es posible que una parte de la carrocería de tu coche cambie un poco: la zona en la que podrás colocar la pegatina indicativa del nivel de contaminación de tu vehículo.
La DGT lleva tiempo trabajando en este proyecto que ha pasado por clasificar en función de su potencial de contaminación a los vehículos que menos contaminan en nuestro país. Son unos 16 millones de coches y suponen aproximadamente la mitad del parque automovilístico actual.
A partir de ahí se ha elaborado un etiquetado que utiliza los colores para distinguir varios niveles:
La pegatina de «cero emisiones» será de color azul y se enviará a 10.000 automovilistas que son titulares de vehículos eléctricos de batería (BEV), vehículos eléctrico de autonomía extendida (REEV), vehículos eléctrico híbrido enchufable (PHEV) con una autonomía mínima de 40 kilómetros o vehículos de pila de combustible.
La categoría “Eco”, de color verde y azul, distingue a los vehículos clasificados en el Registro de Vehículos como vehículos híbridos enchufables con autonomía inferior a 40 km, vehículos híbridos no enchufables (HEV), vehículos propulsados por gas natural (GNC y GNL) o gas licuado del petróleo (GLP). Unos 100.000 vehículos recibirán esta pegatina.
La categoría “B”, de color amarillo, incluye a los vehículos de gasolina que cumplan las normativas Euro 4, 5 y 6 (a partir de 2006) y a los vehículos diésel que cumplan la Euro 6 (matriculados a partir de 2014).
La categoría “C”, de color verde, es para los vehículos de gasolina que cumplan las normativas Euro 3 (a partir de 2000) a los vehículos diésel que cumplan la Euro 4 y 5 (matriculados a partir de 2006).
El objetivo de esta medida es realizar una discriminación positiva a los vehículos menos contaminantes, aunque el siguiente paso será etiquetar el parque completo de automóviles.