Es difícil encontrar a dos conductores que paguen exactamente lo mismo por su seguro de automóvil. En realidad, más que difícil, es casi imposible. Y es que las pólizas se calculan en base a operaciones que tienen en cuenta variados factores personales.

Lo cierto es que, además, cada aseguradora tiene su propio sistema, aunque sí existen algunos factores que prácticamente todas las compañías de seguros tienen en cuenta.

Tu edad… y la edad de tu carné de conducir.

La edad de la persona que conduce el vehículo es, como todos sabemos, determinante. Los conductores más jóvenes, por inexperiencia y juventud, sufren primas más altas debido a que se les considera más propensos a sufrir un accidente de tráfico.

Pero tu edad no es lo único que se tiene en cuenta: la edad de tu carné, es decir, la antigüedad del carné también cuenta mucho. En este caso, al igual que en el anterior, a más años de carné, más experiencia y mejor precio.

Tú y tus circunstancias: dónde vives, en qué trabajas y cuál es tu historia.

Así es: todos estos factores son interesantes para que la aseguradora haga sus cálculos.

Por ejemplo, tu empleo o profesión influye porque estadísticamente hay profesiones con más probabilidades de siniestralidad que otras.

Ocurre lo mismo con el lugar en el que vives: el índice de siniestralidad varía de una ciudad a otra, de una provincia a otra… Y esto también se tiene en cuenta.

En cuanto a “tu historia”, como es lógico la aseguradora tiene en cuenta tu historial de partes al seguro, es decir, cuántos siniestros has declarado, de qué tipo eran… Con estos datos en la mano, cada aseguradora establece su propio sistema de precios, aunque lo habitual es premiar al “buen conductor” y castigar a aquel con una mayor tasa de accidentes o partes.

Todo sobre mi coche

Y en cuanto al vehículo asegurado… ¡lo tendrán en cuenta prácticamente todo!

Desde si el vehículo “dormirá” en garaje hasta los extras que lleve el coche (factores que pueden incrementar el riesgo de robo) hasta el año de matriculación del automóvil (cuanto más nuevo sea, más pagarás por el seguro), pasando por supuesto por todas las características del vehículo, como motorización, combustible, número de plazas…

Toda una labor de ingeniería de datos y cifras que da como resultado el precio a pagar por la póliza de seguro de auto. Por suerte, cuando se trata de golpes o imperfecciones en la chapa o pintura de tu coche lo único que nos importa en CertifiedFirst es que el resultado sea perfecto, duradero y de calidad. Para hacerte una idea del precio en función de las particularidades de tu vehículo (tipo de carrocería, tipo de pintura) tienes nuestra calculadora virtual de presupuestos de pintar el coche: en apenas unos clics y en menos de un minuto tendrás tu resultado. ¡Pruébala!