Pues es exactamente lo que hizo Erran Frazier, un ciudadano estadounidense, residente en Vero Beach, Florida. Frazier comenzó a escuchar un maullido que provenía de alguna parte del interior de su nueva camioneta. Al principio pensó que eran imaginaciones suyas, pero finalmente optó por tratar de salir de dudas y para ello colocó una apetitosa lata de comida para gatos bajo uno de los neumáticos… junto con un sistema de videovigilancia con la esperanza de captar imágenes del intruso felino que vivía de ocupa en su coche y al que no era capaz de ver, pero al que sí escuchaba.

No se sabe muy bien cómo, pero el caso es que la lata de comida apareció vacía, pero la videocámara no mostraba nada revelador. Así que ni corto ni perezoso, la siguiente vez que Frazier escuchó el ya familiar maullido agarró su caja de herramientas y agujereó la carrocería hasta dar con el gato en cuestión. Como gran amante de los animales, Frazier no podía concebir que el gato quedase allí atrapado. Pero estamos seguros de que no muchos conductores serían capaces de romper la carrocería de su automóvil en una misión de rescate gatuna.

El gatito, sano y salvo, fue puesto a disposición de una Protectora de Animales, que ya le ha encontrado un hogar, donde ha sido bautizado como Megan. Hasta la camioneta ha sido premiada por su sufrimiento, ya que los amantes de los gatos o los animales han podido hacer donaciones para ayudar a Frazier a conseguir la cantidad suficiente para poder arreglar su vehículo. ¡Triple final feliz para esta bonita historia!

Aquí puedes ver el vídeo con el héroe y el gatito rescatado.

Esperemos que ningún gatito se cuele en el interior de tu coche, pero si tu carrocería sufre algún daño ya sabes dónde acudir: a un taller de la red de expertos de chapa y pintura de CertifiedFirst. Seguro que hay uno muy cerca de ti: encuéntralo en nuestro buscador de talleres.