Que los excrementos de aves, en general, pueden causar estragos en la pintura del coche no es ningún secreto. Pero en verano es obligado aumentar las precauciones. Si resides habitualmente en alguna zona cercana al mar seguramente ya sabes que además de los gorriones y las palomas de ciudad hay otro gran enemigo capaz de soltar una auténtica “bomba” sobre la carrocería de tu vehículo: la gaviota. Pues bien, si tu destino veraniego es la costa o la playa, ¡ya lo sabes! Cuidado con las gaviotas. En las zonas de “secano” tampoco se libran: las esperadas y simpáticas cigüeñas hacen de las suyas en no pocos pueblos.

Es mejor mantener lejos del coche a estas preciosas aves (que una cosa no quita la otra). Evita aparcar debajo de farolas, cables de tensión, árboles, campanarios de iglesias etc.

Además, en verano los daños provocados por aves e insectos pueden ser más graves. Y esto es debido especialmente a la luz solar, más intensa en el período estival. Lo que ocurre es que el sol calienta la pintura del coche, dilatándola, al tiempo que el excremento de pájaro o el cuerpo de insecto se va deshidratando. Si dejamos estos peligrosos restos sobre la pintura, cuando se enfríe se contraerá de nuevo y quedarán marcas. De ahí que una rápida limpieza pueda salvar a tu automóvil del desastre.

Y sí, ya sabemos que muy difícil conseguir librarse de las temidas cacas de los pájaros. ¿Te ha ocurrido? En este post te contamos con detalle por qué sucede esto y como limpiar la carrocería para que no haya daños. Y si ya no tiene solución y necesitas volver a pintar tu coche, en la red de expertos en chapa y pintura de CertifiedFirst encontrarás la mejor calidad y atención. ¡Consúltanos!